¿Cómo
tener una relación matrimonial provechosa?
(I parte de la serie ¿cómo vivir casado sin
vivir decepcionado?)
Estoy
seguro que cada ser humano tiene una idea muy distinta cuando se habla del
matrimonio, podemos asistir a muchas conferencias que nos den pistas, tácticas,
mecanismos que contribuyan a mantener una sana y saludable relación de pareja.
Lo
cierto es que cada día vamos a descubrir algo nuevo para un matrimonio que
perdure.
Hay tantos
chistes y formas de parafrasear cuando se habla del matrimonio; hemos
convertido esto como un circo a donde nadie quiere entrar, porque los que ya se
rindieron se están ensañando en hacer una muy mal propaganda a ese acto
fundamentado por nuestro creador.
Así y de muchas
formas nos estamos burlando de Dios, hacemos y tomamos decisiones a nuestro
antojo siendo así que hoy vemos el matrimonio como un juego y no con la
seriedad ni la importancia que ello trae en cada ser humano.
Como Sendas de Esperanza, creemos que no hay
matrimonios perfectos, pero si hay matrimonios felices; por ello estamos
seguros que podemos llevar una palabra de aliento a aquellos hogares que están
al borde de la separación o aquellos que
están por formalizar una relación.
En principio quiero
que entiendan algunas cosas que son diferentes, a lo que les hayan dicho o lo
que hayan vivido; por ello mi intención es que usted tenga metas para enfrentar
situaciones y aprender a hacer cambios que son esenciales para una vida
saludable.
Es diferente
leer un libro sobre profecías o cualquier otro tema, pero es necesario adquirir
un conocimiento esencial para vivir o que haga las modificaciones que son
necesarias en las áreas en que como seres humanos tendemos a fallar.
Espero que
interprete mis letras con la intención de aprender y practicar; es como llegar
a un lugar y dar una conferencia sobre un tipo de enfermedad y tener una hora
para explicarles, luego entregar afiches con pasos a seguir para controlar o
evitar dicha enfermedad, en este caso usted tiene un manual, me refiero a la
biblia.
Durante este
ensayo vamos a descubrir todo aquello que cree que le está afectando en su vida
matrimonial; en la vida matrimonial no existe tabú para ser feliz, entenderá
que la fe no es suficiente para mantener a flote su matrimonio, al final de
este ensayo usted no tendrá excusas para ser feliz independientemente con quien
esté casado o si aún no lo está, porque tendrá las herramientas necesarias para
combatir los enemigos de la relación provechosa.
No quiero
cansarle, pero sí, convencerle que si cree que está viviendo una vida infeliz
está perdiendo su tiempo amargándose innecesariamente, cuando puede ser feliz,
vivir una vida plena, llevar una relación provechosa y porque no un matrimonio
saludable.
Siempre que
alguien me cuenta sus problemas esperando una respuesta, empiezo a hacer
preguntas, igual que un médico para ayudarle empieza a hacer preguntas; y esto
es lo que hago con el que quiere ayuda. Si me conociera podría pensar que soy
un perfecto ridículo y no se equivoca y ¿sabe por qué? Porque soy como usted,
una persona común y corriente; pero quiero hacerle partícipe de lo que se está
perdiendo y mi teoría es basada en convicciones bíblicas, así que antes de
mentirles ruego a Dios que mis palabras sean sabias y no que venga el castigo
por condenar a otros a hacer lo que no es apropiado.
Si usted quiere
que le ayuden a salir de la depresión familiar y tener una vida saludable tiene
que ser sincero y responder apropiadamente; casi estoy seguro que más de alguno
que lee este artículo tiene problemas en
su matrimonio por lo diferente que es con su cónyuge:
Hay mujeres necias
Hay padres que están tirando del pelo y
las orejas a sus hijos para disciplinarlos
Hay hombres insatisfechos con la
frecuencia de su vida sexual.
Mi intención de
hacerle reflexionar sobre cómo está llevando su vida, es para que se
autoevalúe, sabe que una de las características de las personas maduras es que
han aprendido a autoevaluarse y a los inmaduros no les gusta la autoevaluación,
a los inmaduros tienen que evaluarlos otros, otro detalle es que no les gusta
ser evaluado; los maduros somos las personas que hemos aprendido a evaluarnos
nosotros mismos sin que nadie nos exija, hemos aprendido a ver la vida; otra
característica es que los maduros hemos aprendido a autocorregirnos y no
necesitamos que nadie nos corrija, los maduros nos equivocamos pero
identificamos nuestras faltas y cuando
las identificamos hacemos lo que podemos para corregirnos. Creo que ya se está
identificando si es maduro o no.
Entonces quiero
que se autoevalúe, quiero que hagamos lo contrario de lo que a Cristo le
molestaba, que las personas anden viendo la paja del ojo ajeno y que ignoren la
biga de su propio ojo.
Empiece a ver su
viga y no mire la paja del ojo ajeno y digo esto, porque para que a usted le
sirva esto, tengo que hacerlo entender que todos tenemos problemas y mientras
usted no entienda que alguna área de su vida anda mal, nadie va poder sembrar
buena semilla; si usted ha intentado vivir su relación matrimonial basada en
las emociones que experimenta y eso es la gran mayoría de las personas, no
puede tener una relación matrimonial estable, porque las relaciones basadas en
emociones son variables y las relaciones basadas en convicciones son seguras.
La vida saludable,
la vida que florece, la vida que se vive conforme a lo que Dios manda es una
vida basada en principios y eso es lo que va a aprender en las próximas 11
entregas de este ensayo.
Los principios
están en la biblia, el éxito de la vida no depende de encontrar a la persona
apropiada; el éxito de su relación matrimonial no depende de si ha elegido o no
a la mujer apropiada, el éxito en la vida no depende de si tiene o no el marido
que quisiera tener, sino que el éxito en la vida depende si está viviendo conforme
a la razón de su creación independientemente de las personas que le rodean.
Estos son principios basados en las escrituras y los principios son verdades y
funcionan siempre, donde quiera que sea, funcionaron antes, funcionan hoy y
estoy seguro que funcionarán después.
La vida está
basada en leyes, existen leyes físicas, no es difícil de entenderlas y nadie se
atreve a querer romperlas, nadie que piensa; hay leyes físicas como la ley de
la gravedad, la ley del equilibrio; usted no puede romperlas, usted no se para en una cuerda floja con más peso en
un lado y menos peso en el otro diciendo voy a mantener el equilibrio en contra
de esta ley, solo un loco lo haría, usted tampoco se tira de un quinto piso
pensando voy a romper la ley de la gravedad, mire que la ley de la gravedad
dice que todos los objetos van al centro de la tierra, dice que a mayor
distancia mayor peso, mayor velocidad es más fuerte el impacto, entonces nadie
puede romper una ley sin salir lastimado, por eso Dios no creó la vida solo con
leyes físicas, Dios también creó la vida con leyes emocionales y espirituales.
Los que rompen
leyes físicas sufren accidentes, traumas, heridas; los que intentan romper las
leyes emocionales sufren heridas y traumas emocionales, un niño maltratado, insultado
es traumado; un matrimonio que no sabe entender sus conflictos, que se insulta,
que se maltrata, que se ignora, que se insulta sexualmente es un matrimonio
enfermo, porque está rompiendo leyes independientemente si es Mormón, Testigo
de Jehová, Evangélico, Católico o Ateo.
Los matrimonios
que rompen principios no pueden vivir saludablemente; hay principios
emocionales y hay principios físicos como también hay leyes espirituales, la
biblia dice: No os engañéis porque Dios no puede ser burlado, todo lo que él
hombre sembrare también eso segará, el que siembra para la carne de la carne
segará destrucción; el que siembra para el Espíritu del Espíritu segará vida
eterna, son leyes de Dios.
Por tal razón es
que muchas veces vivimos matrimonio conflictivos y enfermos, porque consiente e
inconscientemente lastimamos a nuestro cónyuge y no reparamos ni en el mínimo
esfuerzo de corregir lo que estamos haciendo mal. Entienda que cuando
maltratamos al cónyuge rompemos leyes espirituales y mientras no reconozca que
está haciendo mal las cosas jamás va a tener una relación matrimonial
saludable.
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