sábado, 27 de abril de 2013

LA HUMILDAD



LA HUMILDAD



Cuando eres humilde eres libre de orgullo y arrogancia. En la carne te parecerá difícil; pero en Cristo si es posible, porque estás caminando humildemente en el poder del Espíritu Santo y no en tu propio poder personal.

1 Pedro 5:5
“Igualmente, jóvenes,  estad sujetos a los ancianos; y todos sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes”

Dios te manda que en todo lo que hagas lo realices con toda humildad, esto es lo que a Dios le agrada. Cuantas veces no te exaltas con los demás que poco te conocen haciéndoles creer que tienes lo mejor y que nada te falta, que no pasas necesidad y cuando Dios quiere bendecirte por medio de esas personas, la bendición no llega porque creen que es verdad que no necesitas nada; la bendición no llega a  tu vida porque no estás siendo humilde.

Cuantas veces te han tocado la puerta para poder pedirte una ayuda ya sea económica o material y teniendo que dar contigo tu respuesta ha sido “no”, cuando podes actuar con humildad y poder ayudar al necesitado. Invocas a Dios para que te auxilie en momentos de angustia; pero no recibes porque no eres humilde, aun tienes un corazón arrogante y de esa manera Dios nunca escuchará tus peticiones.

Cuantas veces te has creído superior a otros, caminas aparentando lo que no eres, teniendo de menos a los demás, ¿acaso crees que eso le agrada a Dios? De ninguna manera, lo que Dios quiere es que nos amenos unos a otros, que nos portemos como hijos de él, siendo sencillos.

Efesios 4:31-32
“quítese de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería, y maledicencia y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”.

Tú puede manejar el trato injusto perfectamente cuando eres humilde y puedes responder sin ser vencido por la amargura, la humildad piadosa significa que tú no sientes una necesidad de venganza. Cuando eres humilde puedes responder y aprender de las criticas sin una actitud defensiva si es merecido o no, del mismo modo, tú puedes ser consciente de tus fracasos sin ser emocionalmente desvastado, también puedes pedir perdón cuando eres humilde. Mateo 5:23-34.

Comprenderás que la humildad es un don que Dios nos da y si aun no eres humilde a lo mejor te es necesario nacer de nuevo y pedirle que te de un corazón contrito y humillado.


miércoles, 24 de abril de 2013

EL TRABAJO



EL TRABAJO

Dicen que trabajar es un privilegio, hay muchas personas que quisieran trabajar poco y ganar mucho, yo soy una de esas. Pero en realidad el trabajo es una bendición, es la oportunidad que Dios te da para demostrar a los demás que eres diferente, puedes quizás estar en la misma situación que tus compañeros de labores, trabajando mucho y ganando poco ó puedes tener un buen trabajo en el cual ganes los suficiente, sea como sea cada día tienes la oportunidad de ser ejemplo para los demás.
Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como a Cristo; no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios;”  Efesios 6:5-6 
Cada cosa que hagamos debe reflejar el hijo de Dios que llevamos dentro, habrán días difíciles, en los cuales los jefes se desquitarán con nosotros, que los problemas en lugar de disminuir aumentarán, en fin muchas situaciones en las cuales podríamos dejarnos derrotar ó cobrar fuerza, agarrados de la mano de Dios, esforzándonos y salir adelante sobre cada situación. Pero debemos tener presentes que nuestro trabajo es un reflejo de quien somos y a la vez da testimonio de nosotros, te aseguro que si eres un mal empleado, la gente no recordará solo tu nombre o tu cargo sino que dirán siempre “Y era un hijo de Dios ó decía que era cristiano”.
En conclusión que tú trabajo sea una evidencia de lo que  tú eres, y el Dios que está en los cielos te recompensará; porque cuando hacemos las cosas como para con Dios, tenemos la certeza que se hacen de la mejor manera y cada vez que puedas sonríe, saluda y haz que los demás quieran tener lo que tú tienes que es a Cristo en tu corazón.


sábado, 20 de abril de 2013

UNA SONRISA




UNA SONRISA


“Una sonrisa significa mucho. Enriquece a quien la recibe; sin empobrecer a quien la ofrece. Dura un segundo pero su recuerdo, a veces, nunca se borra.”
El pensamiento anterior me parece muy acorde a la reflexión que quiero compartir, si yo te pregunto ¿Tienes motivos para sonreír? Tal vez me dirías que sí, porque tienes una buena familia, un buen trabajo, buena salud etc. Todo eso está muy bien pero hay un motivo mucho más grande y es este:

En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.”                                   1. Juan 4:10

Hay alguien que te amo primero, alguien que sabia tus defectos y virtudes y aun así decidió amarte, el motivo de tu sonrisa debe ser eso, que estés donde estés o hagas lo que hagas hay alguien que te ama y quiere que lleves ese mensaje a cuanta gente lo puede leer

El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados” Isaías 61: 1-2

Hay una misión para ti que conoces ya el amor de Dios y quizás sientas que es muy grande y que es una gran responsabilidad y es cierto, pero hay que comenzar con una sonrisa debemos ser el reflejo de la bendición de Dios en la tierra y no me refiero a lo material sino que a la paz espiritual. Mi hermano ¿cómo realizaras esta misión si te cuesta comenzar con algo sencillo como lo es una sonrisa para tu prójimo?
Pero nunca es tarde, mientras hay vida hay esperanza, ¿ya conoces a tus vecinos?, ¿ayudas a quien lo necesita? ¿Sonríes para mostrar a Cristo en ti?, solo tú puedes cambiar la respuesta a estas preguntas

miércoles, 17 de abril de 2013

LA COMODIDAD DEL CRISTIANO


LA COMODIDAD DEL CRISTIANO


Cuando visitamos al médico ya sea porque padecemos alguna enfermedad o por un chequeo de rutina, muchas veces nos damos cuenta que un pequeño malestar es el resultado de algo muy grave, que si no  se trata a tiempo con el medicamento apropiado, nos puede llevar a la muerte. Hay tratamiento que los aplicamos por unos días y la cura llega casi de inmediato y ya no regresa ese malestar y hay medicamentos que hay que estarlos tomando de por vida para mantener controlada la enfermedad.

Igual nos pasa cuando estamos en CRISTO, a veces venimos de vivir situaciones que nos han devastado y que se convirtieron en una necesidad diaria y por ende no va ser fácil poder deshacernos de ella tan fácilmente sino llevamos un tratamiento (la permanencia en CRISTO).

Tengamos en cuenta que toda atadura de la que hemos sido liberados siempre va a estar allí, esperando para poder volver a amarrarnos en el menor descuido posible.

Mateo 6:33
“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”.

Entonces lo primero que tienes que haces es buscar a Dios y permitirle que trabaje tu vida; no te afanes por querer cambiar, o porque el proceso no sea de inmediato, mantente en el Señor llenándote de su palabra, adórale con intención y lo demás vendrá poco a poco; luego te darás cuenta cómo vas recibiendo poder para irte alejando de las tentaciones.

Ahora es probable que hayan pecados que solo sean unos malos recuerdos en tu vida y no que existe ni la mínima intención de que vuelvas a ellos; pero hay pecados que necesitas toda una vida estar alimentándote de Dios y cada día buscando más de él, para cerrarle toda puerta a esas cadena que por mucho tiempo te mantuvieron atado de pies y manos. Muchas veces cometemos el error de enfriarnos, nos confiamos y al poco tiempo de sentir paz en nuestro corazón, creyendo que ya fuimos liberados de ciertas tentaciones, nos alejamos de Dios y ese es un error muy grande que cometemos los cristianos, nos acomodamos; pero cuando menos lo esperamos, el enemigo vuelve aun con más fuerza a tomar posesión de lo que antes fue su casa.

Mateo 12: 43-45
“Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo y no lo halla.
Entonces dice: Volveré a mi casa de donde salí; y cuando llega, la halla desocupada, barrida y adornada.
Entonces va, y toma consigo otros sietes espíritus peores que él, y entrados, moran allí; y el postrer estado de aquel hombre viene a ser  peor que el primero. Así también acontecerá a esta mala generación”.

No te confíes que el enemigo está en tu puerta y en tus ventanas esperando el menor descuido para invadirte de nuevo. Mantente en CRISTO y serás verdaderamente libre.