RESPETANDO LAS
ORACIONES
Muchas veces escuchamos en las películas, que cuando la gente
hace juramentos de lealtad debe de cumplirlos, cuantas veces juramos que algo
es cierto y estamos cubriendo mentiras y falsedades, cuando oramos ¿Será que
siempre respetamos nuestras oraciones? ¿Sabemos en realidad con quien estamos
hablando? Muchos podrían contestar que sí, que hablan con el dador de la vida,
con el dueño de este mundo; pero ciertamente muchas veces no respetamos lo que
platicamos con Dios.
Aunque no lo creas esta es una gran verdad, ya que utilizamos
a Dios como un número de emergencia que solamente en la necesidad es buscado,
nosotros debemos día a día tener un encuentro con Dios, para poder crear una
relación intima con él, pero si solo lo buscamos cuando lo necesitamos, ¿Cómo podremos
decir que le amamos sino respetamos lo que le decimos en oración?
“Cuando extendáis vuestras
manos, yo esconderé de vosotros mis ojos, asimismo cuando multipliquéis la
oración, yo no oiré; llenas están de sangre vuestras manos.” Isaías 1:15
Nuestro Dios lo que espera que no mintamos al orar que seamos
sinceros con las palabras con las que nos dirijamos ante su presencia, no es
necesario prometer cosas que no cumpliremos
por lograr el favor de Dios, al hacer esto estamos alejando mucho más la
respuesta que él tiene para nosotros, cuando vengas delante de Dios habla con
sinceridad, Dios conoce tu corazón.
“Engañoso es el corazón
más que todas las cosas, y perverso; ¿Quién lo conocerá? Yo Jehová, que
escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino,
según el fruto de sus obras” Jeremías 17:9-10
Lo mejor que podemos hacer es venir delante de Dios con un
corazón dispuesto y listo para ser escuchado, el mensaje de esta reflexión es
que no tengas miedo de venir delante de Dios, no importa cómo te sientas, los
pecados que hayas hecho, el espera que te acerques, pero hazlo sinceramente, no
hagas promesas que no vas a cumplir, recuerda que al hacer esto es a Dios a
quien le mientes.
“Cuando a Dios haces
promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos.
Cumple lo que prometes. Mejor es que no prometas, y no que prometas y no
cumplas” Eclesiastés 5:4-5
En pocas palabras Dios quiere que te acerques a él, para
poder escuchar lo que tiene para ti, a veces hablamos tanto en las oraciones y
olvidamos que la oración es una comunicación y para que la comunicación
funciones ambas partes deben de hablar, tenemos que aprender a dejar de hablar
con locura y sin sentido en las oraciones y comenzar a escuchar porque recuerda
lo que dice nuestro padre.
“Cuando fueres a la
casa de Dios, guarda tu pie; y acércate más para oír que para ofrecer el
sacrificio de los necios; porque no saben que hacen mal” Eclesiastés 5:1
Dejemos nuestra necedad fuera y ofrezcamos a Dios más
nuestros oídos para escuchar lo que él tiene para nosotros, en la oración lo
que más quiere Dios de nosotros es que tengamos un corazón dispuesto.
“Dame hijo mío, tu
corazón, Y miren tus ojos por mis caminos”Proverbios 23:26
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