ASESINOS ESPIRITUALES
El titulo de esta reflexión, me
recuerda a las películas de acción viejas, en las cuales contrataban a una
persona para que se encargara de matar a objetivos específicos, siempre había
un asesino, una víctima y un héroe que hacia lo posible para que la víctima no
perdiera la vida; quiero que comparemos esto con el mundo espiritual ya que
existen asesinos del espíritu que atacan nuestra vida día a día y muchas veces
logran su cometido, matar nuestros anhelos de buscar a Cristo, desanimarnos de
seguir adelante etc.
La mayoría de predicaciones nos
hablan de cómo debemos de reaccionar ante estos asesinos, que son la familia,
los compañeros de estudio o trabajo e incluso los mismos miembros de la
iglesia, pero ¿Que pasa cuando los asesinos somos nosotros? Quizás pienses que
tu no haces nada malo para desanimar a alguien, pero es momento de pensar con más
cuidado si esto es verdad.
" Pero
mirad que esta libertad vuestra no venga a ser tropezadero para los débiles." 1 Corintios 8:9
Debemos tener presente que
nuestro actuar siempre influirá en la gente que nos rodea, muchos pueden decir
que su vida es suya y no tiene porque esperar la aceptación de los demás, pero
el enfoque que da la palabra hace referencia a no esperar la aceptación sino
más bien ser testimonio para que así como tu llegaste a los caminos de Dios,
puedan otros conocer esta verdad.
Muchas veces nos convertimos en
asesinos del Espíritu de las personas que nos rodean, por ejemplo cuando
alguien está pasando un mal momento, en los lugares de trabajo se juntan rápidamente
todos los que señalan a esa persona, los que hace leña de ese árbol caído y
muchas veces por no decir todas las veces somos parte de esos leñadores, de
esos asesinos espirituales, somos puestos en esta tierra para poder ser luz y
que las personas que buscan consuelo puedan obtenerlo a través de nosotros no
porque seamos nosotros los que se los brindemos sino más bien les mostremos
adonde deben correr en el momento de la aflicción.
"Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi
socorro viene de Jehová,
Que hizo los cielos y la tierra." Salmo 121:1-2
Que hizo los cielos y la tierra." Salmo 121:1-2
Todo Cristiano conoce el versículo
anterior y lo hemos repetido constantemente en momentos de aflicción, pero ¿que
hacen los que no conocen de Dios?¿Adonde corren? perecen porque no tienen
adonde huir, al principio hacía referencia de las películas de acción si te
fijas estamos llamados a ser héroes para todos aquellos que no conocen de Dios,
de poderles mostrar hacia donde ir a encontrar refugio. Ahora pregúntate ¿que estás
haciendo para lograr eso? ¿te reúnes a criticar a tus compañeros de trabajo,
estudio, iglesia igual que todos los demás?, ¿celebras los chistes, las bromas
vulgares igual que antes de conocer a Cristo? si aun sigues haciendo lo mismo,
te has convertido en un asesino espiritual ya que le estas demostrando a los
demás que nos has cambiado, que sigues siendo el mismo a pesar que ahora vas a
una iglesia, debes cambiar tus actitudes ya que tu testimonio vale mucho.
Ahora más que nunca debes cuidar
lo que dices, lo que haces y como actúas, créeme cuando te digo que tu
testimonio vale, alrededor tuyo hay gente necesitada de Cristo que por puro
temor no se atreven y cuando alguien que conocen se hace cristiano esperan ver
cambios, quieren saber si Cristo funciona para ti, amigo el mensaje de esta reflexión
es que debes de cuidar tu testimonio, tus palabras, evitar ser piedra de
tropiezo, porque a veces creemos que con ir a la iglesia es suficiente, es fácil
portarnos bien en la iglesia lo difícil es fuera de ella, si realmente estamos
demostrando que Cristo esta en nosotros o somos asesinos espirituales
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