EL MAYOR OBSTÁCULO
Cuando a
un cristiano que está comenzando a conocer los caminos de Dios se le hace una
pregunta cómo ¿Cuál es tu mayor obstáculo? Muchos contestarían las tentaciones,
otros las criticas, la dificultad para congregarse, es mas hay mucha gente que
pierde el ánimo de seguir por problemas en su iglesia o con los mismos
hermanos, yo quiero decirte en esta hora que el principal obstáculo eres tú mismo.
Muchas
veces dejamos que nuestra razón y sentimientos nublen nuestras decisiones
espirituales, la biblia dice lo siguiente
“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién
lo conocerá?” Jeremías 17:9
Cuando
muchas veces decimos que no queremos ir a la iglesia, porque estamos tristes,
deprimidos, pero no hay una razón aparente para hacerlo, nos convertimos en
nuestros propios obstáculos, evitamos que nuestro espíritu se alimente de lo
que Dios tiene preparado.
Hay casos
donde por un problema personal, un mal entendido o a veces una simple y seria
mirada por parte de los hermanos de una congregación, provoca la excusa en
muchos para ya no asistir a una iglesia, si tú tienes necesidad no tiene que
importarte que alguien te mire mal, o no le caigas bien, es más si eres
agradecido con Cristo y con el sacrificio que hizo en la cruz por tu vida,
debes quitar todo obstáculo mental y seguir adelante en el camino de Dios,
Cristo no
desistió de su sacrificio, a pesar que él no solo obtuvo malas miradas, el fue
completamente humillado y asesinado, y aun así siguió con su ministerio, ahora
te pregunto a ti, ¿Cuál es el mayor obstáculo en tu vida?, ¿Qué te detiene a
seguir en el camino de Dios? Ciertamente recuerda lo que decía Pablo:
“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya
alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y
extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al
premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. “ Filipenses 3:13-14
Hay mucho en esta vida que puede impedir que busques a
Dios, los afanes, los problemas y el mismo Satanás no querrá que sigas
adelante, pero dependerá de ti, que todas esas situaciones se conviertan en
obstáculos o en oportunidades para que la gloria de Dios se manifieste
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