sábado, 26 de enero de 2013

A CUENTA CON DIOS



A CUENTA CON DIOS




Vivimos en un mundo violento; en donde a diario nos sorprendemos por las noticias aterradoras de los acontecimientos en el día a día.

Nos preocupamos por lo que está pasando, por lo que les pasa a otras personas que a lo mejor no conocemos, esto nos impacta a tal grado de sentir el dolor de aquellos que sufren.

Pero los más triste es que nos preocupamos por los demás sabiendo que no está a nuestro alcance poder hacer algo; pero estamos descuidando nuestra alma. Salimos de nuestro hogar, el trabajo y a cualquier lugar casi seguros que vamos a regresar de nuevo.

¿En realidad estas a cuenta con Dios?

Creo que deberíamos reflexionar sobre esto, porque no sabemos cuándo ni a qué hora seremos llamados, pero tenemos a un salvador tan grande y misericordioso que está pendiente y haciéndonos el llamado a ponernos a cuenta.
ISAÍAS 1:18
                    “venid luego, dice Jehová, estemos a cuenta: si vuestros pecados fueran como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.”

Muchas veces creemos que porque somos miembros de una congregación, servimos en una iglesia, leemos la biblia o porque oramos ya estamos a cuenta con Dios; pero podría ser que no estamos a cuenta, es probable que todavía estemos siendo esclavos del pecado. Si este es el caso nos es necesario volver a recordar el sacrificio que Cristo hizo por nosotros en la Cruz.

Somos seres humanos que conciente ó inconcientemente pecamos a cada momento de una u otra manera, por ello nos es necesario ponernos a cuenta con DIOS no olvidando encomendarnos y arrepentirnos de corazón de aquello que hacemos y que sabemos que a Dios no le agrada.

Porque si vivimos envueltos de mentiras creyendo que no necesitamos arrepentirnos de nada porque ya el pecado no está en nosotros, entonces hacemos a DIOS mentiroso, porque estamos negando la existencia del pecado en nosotros.
1 Juan 1:10
                   “si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, Y su palabra no está en nosotros.”


 

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