¿Por qué la consecuencia del
pecado no es instantánea?
Hoy quiero hablar del efecto que tiene el actuar
desmedida y desordenadamente sea para bien o para mal; me refiero a que todo lo
que hacemos tiene su efecto, si hacemos el bien nos sentimos bien y quizá más
tarde recibamos parte de lo que sembramos, hacer el bien siempre nos va hacer
sentir bien; pero hacer el mal también trae su propia consecuencia y no necesariamente hacer el mal contra otros,
porque esto es también cuando nos pervertimos nosotros mismos haciendo cosas
que contaminan nuestro cuerpo, empañan nuestra moral y nos detienen el
crecimiento espiritual.
El ser humano siempre está haciendo cosas que
perjudican así mismo, porque el efecto del pecado no es al instante, no se sabe si va a llegar mañana, ni pasado
mañana, ni en un mes, ni en un año, el efecto es impredecible por lo que no se
sabe cuándo va a llegar.
Hace un par de años escribí un artículo que hablaba
de la consecuencia del pecado precisamente un día de estos que lo estaba leyendo
me di cuenta que debía continuar escribiendo sobre ello y cuando me disponía a
dormir me cayó un mensaje y era un buen amigo preguntándome ¿porque Dios
perdona el pecado pero no la consecuencia?, creo que muchos nos hemos hecho
esta pregunta, si Dios perdona el pecado y la consecuencia es parte del pecado
por qué no quita también la consecuencia; pero sabe Dios nos perdona todo
pecado porque el pecado mata el alma, más la consecuencia mata la carne y como
la carne se queda aquí en la tierra es allí que sentimos todo tipo de dolor
como pago de nuestras acciones.
Tenga claro que desde el momento que cometió el
pecado su efecto viene con él, solo que no se manifiesta al instante, entonces
en cualquier momento llegará su pago y quizá en el mejor momento de su vida;
porque Dios es un Dios de amor y por
ello tiene misericordia de nosotros y no va a dejar que pasemos por la tormenta
cuando hay 2 o 3 o más pequeñitos o sus
papas que dependen económicamente de usted; si usted se queda sin trabajo, si
usted enferma gravemente, si va a la cárcel los que sufren son aquellos que
dependen de usted, es por ello que Dios nos mantiene a flote porque no va
permitir que por su accionar paguen inocente que no deben nada.
Y no sé si se
ha fijado que cuando nos llegan todos los males habido y por haber es cuando ya
nuestros hijos ya están grandes y que ya no dependen económicamente de nosotros,
he visto gente que ya no gozan de su jubilación porque se les han sumado tanto
males que solo viven con agüita tibia y 2 o 3 veces por semana están en los
hospitales porque están tan enfermos que no dejan de padecer; pero es así que Dios
es tan misericordioso que nos deja mucha veces la consecuencia para el final,
cuando ya no tenemos que preocuparnos por nada sino solo por nuestros padecimientos.
Esto me da miedo porque somos pecadores.
Lo que muchas veces hace que nuestros pecados
alcancen a nuestros hijos, nietos, porque les heredamos lo que hemos sido (Ver
artículo como huir de los pecados generacionales) y como la consecuencia del
pecado no es instantánea es por ello que no paramos de pecar y hacemos tantas
cosas que sabemos que no agradan a Dios; pero como Dios perdona nuestros
pecados cada vez que nos arrepentimos creemos que ya pasó todo y que esto ya
terminó, e allí que volvemos a pecar, luego volvemos a confesar nuestros pecado
y nuevamente nos sentimos bien, el problema viene después que hemos olvidado
todo y por ello es que muchas veces estamos padeciendo tanto y no nos
explicamos cómo es que ni nos hemos recuperado de una enfermedad cuando ya nos
están diagnosticando otra; no hemos salido de una tormenta cuando nos llega un
huracán.
Por eso es que muchas veces la consecuencia llega
cuando ya dependemos de otros, y mire como es Dios de bello que muchas veces nos
la cobra suave, porque si nos pasara la factura como debería de ser nos
terminaría.
En conclusión, nuestro accionar de hoy es lo que
vamos a cosechar mañana y es algo que no podemos evitar porque lo que hacemos
siempre va a tener su efecto.
Usted y yo podemos hacer la diferencia y
reflexionemos como queremos terminar nuestros últimos años de vida, o mejor
dicho como queremos vivir si con aflicción o con bendición; pero por nada se
detenga ¿Qué porque está en pecado ya no va a leer la biblia, ya no va ir a la
iglesia, o va dejar de orar? De ninguna manera, porque es cuando más
necesitamos alimentarnos espiritualmente porque Dios siempre tiene misericordia
del que le busca, pero jamás va alcanzar victoria culpándose de lo que hace y
alejándose de Dios.
El enemigo quiere que se culpe de lo que hace,
porque cuando usted se siente culpable es cuando se aleja de Cristo, porque
cree que es por gusto si siempre vuelve a lo mismo; levántese cada vez que
caiga y si vuelve a caer vuelva a levantarse porque el reino de los cielos es
para los valientes, para los perseverantes, para los luchadores no para los que
se rinden.
Señor gracias porque una vez más me permites ver lo
fatal como consecuencia del pecado, me permites darme cuenta que si dejo de
alimentarme espiritualmente difícilmente vamos a poder huir del pecado.
Gracias padre Santo por la oportunidad que me das de
un día más de vida, por permitirme despertar y contemplar tus maravillas, y
cada vez que esté dispuesto a fallar
seas tú quien envié ángeles para que me protejan y no permitan que te
falle.
Que quien lea este articulo seas tú quien ha
permitido que encuentre una verdad que le de dirección a su vida, y sobre todo
nunca quites tu protección de nosotros Amen.
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