domingo, 25 de septiembre de 2016

Aprobado para ser bendecidos

Aprobado para ser bendecidos

Hoy traigo una bonita reflexión como Dios bendice y cómo podemos pedir ser bendecidos, pero antes necesitamos que Cristo nos evalúe, pero para ellos tenemos que decirle lo que estamos padeciendo para que Dios nos de lo que necesitamos.

Cuando vamos al médico ya sea en una clínica privada o pública por más que nos esforcemos para hacer una larga fila para que nos den el medicamento, nunca nos van a dar nada si no tenemos una receta que compruebe que ya fuimos revisados y aprobados por el médico; tampoco el médico le va a dar nada si usted no se toma la libertad de decirle de lo que está padeciendo. Si miente probablemente no le den nada,  porque el médico sabe que usted no  tiene nada; si usted olvida algún detalle y no le cuenta donde exactamente es que le duele probablemente le va a recetar un medicamento que no le hará ningún efecto. Si se ha enfermado más de una vez sabe que es cierto.

Santiago 4:2-3 Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. Pedís y no recibís porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.

En este versículo vemos como Dios nos exhorta que no recibimos porque no pedimos y si pedimos, pedimos mal, cuántos de nosotros pedimos lo que queremos mas no lo que necesitamos, Dios siempre está dispuesto a satisfacer las necesidades pero jamás le va a complacer sus caprichos.

Pero este es el error que muchos cometemos y nos quejamos que Dios no escucha nuestras oraciones porque pasan los años y no pasamos de comer lo mismo, el mismo pantalón, la misma camisa y los mismos zapatos, ¿sabe porque? Porque pedimos lo que queremos y por pedir lo que queremos no llega lo que realmente necesitamos; usted no debería pedir un vehículo del año cuando ni calle hay para llegar a su casa; usted no debería estar orando por una piscina si la casa donde vive se la han prestado; no debería pedir por un aumento de salario si ni trabajo tiene. Dios es un Dios de orden y todo llega de acuerdo a lo que necesitamos y podemos administrar, porque así como el universo no se mueve solo sino que necesita de ayuda también Dios necesita que usted actúe para que él pueda sembrar.

Es por ello que necesitamos consultar con Dios así como consultamos con el médico, siempre va ser necesario que le digamos  lo que tenemos, que área de nuestro cuerpo nos duele, que área de nuestro carácter es la que no podemos controlar, que adicciones tenemos con las que solos ya no podemos, cuáles son nuestras luchas, que sentimos que no nos da paz, que necesitamos y para que lo necesitamos para que así como el médico nos da una receta para calmar y curar las enfermedades también nuestro padre nos de la receta que necesitamos y así con libertad podamos reclamar esas bendiciones, con la misma libertad con la que reclamamos los medicamentos; también le aclaro que nunca llegará nada si no consultamos y tampoco esta motivación funciona si Cristo no es el centro de su vida, porque así como es necesario pagar una consulta o tener un registro que compruebe que usted está cotizando también con Cristo tenemos que estar registrado en el libro de la vida.

Otro detalle es que no recibimos porque pedimos mal, me refiero que no pedimos lo que no necesitamos, cuando consultamos a Dios no le decimos lo que realmente tenemos o que sentimos por eso es que la bendición no llega, porque al igual que cuando engañamos al médico no recibimos el medicamento correcto, sino somos sinceros con Dios tampoco vamos a recibir lo que necesitamos; porque como creemos que Dios conoce todas nuestras necesidades van a llegar  automáticamente , pues le tengo una noticia, se va a morir esperando toda una vida y nunca va a recibir nada.

Personalmente creo que en el universo que no es nuestro sino de Dios hay una puerta donde sale la bendición para cada uno de sus hijos, pero solo se abre cuando abrimos la boca para consultar y pedir lo que necesitamos y si cuando recibimos necesitamos más, no hay problema volvemos a pedir las veces que necesitamos porque todo es gratis no tenemos que pagar nada.

Salmos 24-1 De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan.

Dice que somos hijos del dueño del universo, entonces pidamos bien y tenga por seguro que llegarán grandes bendiciones.
A principio de años hice una lista de muchas cosas que necesitaba y le dije a Dios, esto es lo que necesito y por muchas noches pasé hablando con Dios que como iba mi pedido, un día me acordé de lo que había pedido y al revisar la lista me di cuenta que más de la mitad de mi pedido por el que había estado orando ya me había llegado.

Y si no llega es porque dejamos de darle seguimiento a lo que pedimos

Hablemos con Dios cada vez que se pueda y de esta manera le estamos dando seguimiento por lo que hemos consultado a nuestro padre; pero cuando no le damos seguimiento la bendición de va por otro camino o nos llega incompleta.



domingo, 18 de septiembre de 2016

LA RUTINA QUE MATA AL CRISTIANO

LA RUTINA QUE MATA AL CRISTIANO

Cuando era niño vi una película sobre un hombre que había secuestrado un autobús y si el autobús paraba explotaba por lo cual el autobús siempre debía de ser conducido a máxima velocidad, toda la película es de acción y suspenso ya que en ambas situaciones ya sea andando a máxima velocidad para evitar que la bomba explote o deteniéndose para no chocar con nada y haciendo explotar la bomba, en ambas los protagonistas corrían peligro.

Les comento esto porque esa escena me recuerda a nosotros queriendo detenernos, poner un alto a algo en nuestras vidas, cambiar de rumbo, de decisiones pero cuando somos más adultos, olvidamos como hacerlo, vamos a las iglesias y pedimos y pedimos, pero no vemos un cambio, vemos que todo sigue igual, al ver esto nos frustramos, y en lugar de vivir la vida, simplemente vivimos una rutina, no podemos detenernos de esa rutina, dormimos, despertamos, vamos al trabajo, volvemos a casa y así una y otra vez, y solamente cuando algo nos va mal, es cuando realmente nos detenemos ya sea para buscar a Dios o para alejarnos de él.

Comencé este articulo con la idea de hablar sobre las adicciones, pero me di cuenta que no conozco nada al respecto, sobre lo que llamaría vicio, sin embargo entendí que el no poder cambiar el rumbo de mi vida es una adicción en sí, ya sea por que disfruto lamentándome sobre mi situación o soy un cobarde que tiene miedo a enfrentar sus temores.

Mi hermano estamos en esta tierra para ser la voluntad de Dios y es lógico que muchas veces tengamos temor del mañana y a pesar de ser personas que asisten y sirven en un ministerio no nos atrevemos a cambiar de rumbo, ser diferentes, vivimos nuestra vida lamentándonos del porque de las cosas, por ejemplo que porque no hay un mejor trabajo, porque no he encontrado a la persona ideal para formar una familia, que porque no me alcanza el dinero, vivimos llenándonos de porqués y no hacemos nada, no nos detenemos seguimos en una sola vía, no aprendemos a ver a nuestros lados, a ver las opciones que Dios nos da, muchas veces por temor o por ignorancia y preferimos seguir tal como estamos, hay una frase que utilizan las personas mediocres, que dice "Si algo funciona para que mejorarlo" y al aplicarlo a nuestra vida decimos "Así he vivido toda mi vida"

En el libro de Génesis hay una parte de las escrituras en la cual José manda a traer a su padre a Egipto, ya que después de haber sido vendido por sus hermanos, Dios lo llevo hasta ser gobernador y el era encargado de velar por el bienestar de Egipto, debido a una sequia de 7 años, dice la palabra de Dios que Jacob el padre de José tenia temor de ir a Egipto, a pesar de la alegría de saber que su hijo José estaba vivo, Quizás no sabía que les pasaría, quizás José habría cambiado, quizás era una trampa, muchas cosas pasaban por el pensamiento de Jacob, a veces sabemos que un cambio en nuestra vida nos traerá un bien, pero tenemos temor a lo incierto a no conocer cual será el resultado, estos últimos meses he estado enfermándome muy seguido y es debido al poco cuidado que he puesto en lo que como, cuando un diabético está mal, dice que no volverá a comer azúcar, cuando una persona que padece de la presión se siente mal, dice que no volverá  a comer sal, o alguien que padezca de los triglicéridos dice que comerá sanamente, pero cuando las personas comienzan a sentirse bien de nuevo vuelven a sus viejos hábitos y es porque realmente ellos nunca cambiaron el rumbo, estaban en ese autobús a toda velocidad aun vivos pero seguían ahí, solamente hicieron una parada temporal, pero se volvieron a subir al autobús, personas que no cambian de rumbo, son como si hubieran estado secuestrados y al ser liberados le piden el teléfono a su secuestrador para seguir en contacto, no hay un cambio siguen por el mismo camino pero a una velocidad diferente.

Ahora bien para cambiar de rumbo, es de dar el primer paso, y como damos ese primer paso, es poniendo nuestra confianza en Dios, pero eso es algo que tampoco tenemos a veces porque no confiamos en Dios? es porque no confiamos en alguien que no conocemos, desde pequeños nos dicen que no confiemos en desconocidos y eso es verdad pero Dios se vuelve un desconocido porque no nos tomamos el tiempo en conocerlo, Dios nos ha dado todos los canales y caminos para saber de él, dejemos de creer que ir a una iglesia es conocer a Dios, conoces a Dios de dos formas, la primera es por medio de su palabra, debes de leer por tu cuenta la biblia, para que sepas las bendiciones que Dios tiene para ti, y la segunda es por medio de la oración, a veces Dios nos pone en situaciones difíciles porque son las únicas formas en las cuales nos acordamos de él, en los momentos de  dolor es cuando más he clamado a Dios, pero que pasa cuando el dolor se va, si no aprendemos a conocerlo dejaremos de buscarlo, mi hermano, este articulo habla sobre hacer un cambio en nuestras vidas, querer ver la gloria de Dios en esta tierra. Pero lo primero es cambiar la dirección confiando en que Dios nos está guiando y como haremos eso, buscando y anhelando conocerlo cada día mas y mas.

Jacob tenia temor pero Dios le hablo diciendo que no temiera que él estaba con él, que ese camino hacia Egipto una tierra que desconocía, no le pasaría nada porque no iba solo, iba de la mano de Dios, no tengas temor en cambiar si Dios está contigo, nada malo podrá pasarte, pero lo que necesitas es buscar a Dios y conocerle mas y mas.

No importa que estés subido en una adicción que no puedas parar, que tengas problemas financieros que no sepas como solventar, que quizás una enfermedad te agobie y pienses que todo está perdido, si dejas que Dios guie tu vida, no importa el destino siempre será para bien, no importa el Egipto que estés atravesando en medio de la dificultada podrás nuevamente florecer.
Como das ese primer paso es de la siguiente manera invitando a Jesús a gobernar tu corazón, Ora conmigo de la siguiente manera

"Señor Jesús, creo que eres Dios que moriste en la cruz por mis pecados, me arrepiento, soy pecador perdóname señor, quiero cambiar mi vida, quiero que vivas en mi corazón y que guíes mis pasos hacia la eternidad contigo, Amen"

Haz dado el primer paso para cambiar el rumbo de tu vida.
Para seguir en contacto puedes escribirnos a contacto contactosendasdeesperanza@gmail.com o visitarnos en http://sendasdeesperanza.blogspot.com/ buscar a Dios no es un camino facil, pero tampoco es imposible, estaremos orando por ti.