RECUERDOS QUE TE ROBAN EL GOZO

RECUERDOS QUE ROBAN EL GOZO

Haciendo un recuento de los eventos que he pasado desde que tengo uso de razón hasta el día de hoy me doy cuenta que no ha sido nada fácil, pues a pesar de estar en grandes dificultades Dios siempre estuvo allí para consolarme. Con el pasar de los años uno llega a darse cuenta que es necesario que pases por situaciones que muchas veces no son nada agradables, pero esas huellas son las que hacen que valores tu vida. Durante mucho tiempo pase preguntándome porque Dios había permitido tanto dolor en mi vida y me refiero al hecho de haber perdido a 3 de mis hermanos en un mismo año; esto me marcó a tal grado que cuando veía situaciones similares a lo que me había Pasado, la herida que yo creía que había sanado empezaba de nuevo a sangrar y me regresaba al pasado y nuevamente me deprimía como al principio.

Este ciclo de mi vida lo viví por muchos años hasta que un Día decidí acercarme a Cristo y fue allí en donde empecé a descansar y mi vida volvió a tener sentido. Porque eso es lo que Cristo hace cuando te rindes y le entregas el corazón, Dios te transforma y sana toda herida, solo en él pude lograr superar el dolor del pasado y es que a eso vino para darnos vida, para darnos paz.

“La paz os dejo, la paz o doy; yo no os la doy como el mundo la da, no se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”.

Juan 14:27

No se si te ha pasado que muchas veces los recuerdos llegan a entristecerte tanto que hacen que te olvides de Dios, y si le permite que reposen en tu corazón esos mismos recuerdos llegan a robarte el gozo de ser un hijo de Dios y lo mas peligroso es que pueden interferir en tu crecimiento espiritual.

Cristo en su bendita palabra nos exhorta a no tener miedo ni a permitir que se turbe nuestro corazón, porque nos ha dado la potestad de tener paz a pesar de estar pasando por la tormenta. Los recuerdos siempre van a estar allí, pero dependerá de ti si permites que esos recuerdos del pasado te atormenten. No se por lo que tu estés pasando o por lo que hayas pasado; a lo mejor fuiste victima de algún abuso, de maltrato por tu pareja, talvez aun sientas remordimientos porque por alguna razón tuviste que abortar y esos recuerdos aun te atormentan; déjame decirte que el pasado fue parte de tu vida, pero ya no está pasando en tu vida, por ello tienes que enterrar tu pasado, no permitas que lo que no pudiste hacer en tu tiempo te marque de por vida, recuerda que nada pasa sin que Dios no lo permita, por ello no dejes que el pasado te siga destruyendo porque eso era parte de la vieja manera de vivir, mas ahora permítete vivir gozoso en él Señor.

Cuando intentamos algo y fracasamos casi siempre nos culpamos a nosotros mismo ó a nuestra familia y pasan los años y aun vivimos con ese recuerdo, en otro caso nos creemos inferiores cuando nos comparamos con otras personas porque hemos hecho cosas desastrosas; te pregunto ¿vale la pena sufrir por lo que ya pasó?

“Camina hacia delante para llegar a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”.

Filipenses 3:14

Muchas veces es incomodo cuando el mundo nos recuerda de dónde venimos y una sola palabra nos recuerda las luchas que llevamos; pero no nos dejemos agobiar por esos patrones de conductas, porque eso fue en nuestra vida pasada mas ahora estamos limpios por la Sangre del Cordero que es Cristo.

“Hermanos yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está adelante.”

Filipenses 3:13

 

Quizás aun te sientas mal por lo que has hecho o lo que te hicieron en el pasado, pero hagamos como dice el apóstol Pablo olvidando lo que queda atrás y enfocándonos a donde queremos llegar.