¿Por qué no estoy conforme con mi vida espiritual? PARTE 2

¿Por qué no estoy conforme con mi vida espiritual? PARTE 2

Hace un par de meses escribí una nota que hablaba de las fases del porque la soledad llega a casa, hoy voy a hablar un poco de los factores que llevan a una persona a sentirse solo.

La humanidad se enfrenta a un mundo donde hay tanta contaminación, bacterias,  virus, hongos a los que nos exponemos día con día; a pesar que nuestro organismo está preparado con defensas que actúan como barreras ante estos enemigos, muchas veces no pueden con las enfermedades y algunos logran su propósito de enfermarnos.

En la vida espiritual sucede lo mismo,  estamos rodeados y me atrevo a decir que hay pecado en todo lo que vemos que si no tenemos cuidado es fácil contaminarnos; pero si queremos que  el pecado no nos lastime, tenemos que alimentar bien esa barrera para que le haga guerra al pecado, me refiero que esa fortaleza va depender de que tan entregados estamos con Dios, porque Dios es nuestro refuerzo espiritual que actúa cuando humanamente ya no podemos en otras palabra no va hacer lo que nosotros podemos hacer.

He allí que si está pidiendo a Dios que le quite esto y lo otro; que le quite aquí y que le quite allá; que le sane esto y lo otro; que le ayude en su situación financiera y sigue gastando desmedidamente téngalo por seguro que Dios no va hacer nada; usted quiere sanar de su enfermedad  y sigue con un desorden alimenticio, Dios no va hacer nada. Entonces tenga claro que el poder de Dios se activa cuando usted hace lo que le corresponde hacer, porque todo favor, todo milagro tiene 2 partes y la fácil le corresponde a usted y la difícil a Dios.

No es mi intención hacerle sentir mal ni que piense en rendirse, pero su fortaleza viene  cuando usted empieza a esforzarse por ello es que el hombre de éxito es aquel que hizo su parte

-          Usted no puede pedir y pedir sin hacer nada para lograrlo.

-          No puede orar por trabajo creyendo que Dios le va a responder si aun no se levanta y sale a buscarlo.

-          Usted no puede pretender sanar de una enfermedad si ni tan siquiera abre la boca para tomarse una pastilla.

-          No puede culpar a Dios del fracaso que está viviendo en su vida matrimonial, cuando no es capaz de cortar esa relación que tiene con su amante.

-          Usted no puede culpar a Dios porque lo está dejando el tren, cuando su vestuario da pena y fácilmente camina en un embotellamiento porque asusta a cualquiera y no me venga a decir que no le sale nada porque es fea o feo, le aseguro que si se arreglara se viera diferente.

-          No venga a culpar a Dios de su soltería si ya llegó a los 40; si el que tiene que conquistar es usted, Dios nunca va hablar por usted. Me imagino a Dios enviándoles una chica que le diga “buenas tardes me dijo Dios que usted está buscando novia” eso nunca va suceder.

Entonces nos frustramos porque esperamos que Dios haga lo que a nosotros nos corresponde hacer, por ello nos llegamos a sentir solos porque no logramos resultados esperados.

Quiero enfatizar en esto y por experiencia solo voy hablar de 2 factores que nos llevan a sentirnos solo e inconforme con nuestra vida espiritual.

El primer factor es cuando esperamos  que Dios haga magia; hacemos a un Dios mágico me imagino a Dios escuchando solo palabras como “ dame, dame”  y para ello quiero contarle una pequeña anécdota “ vi a un hombre que se le había dañado su vehículo, 100 metros adelante había un lugar donde se lo podían reparar, el tipo se salió del auto y desde una esquina observaba su auto; la gente pasaba y nadie le ayudaba porque parecía que él no necesitaba ayuda, después de unas horas el tipo empezó a empujar el vehículo y con gran esfuerzo hizo que empezaran a rodar las llantas y al verlo la gente que pasaba vieron el esfuerzo y muchos se acomidieron a ayudarle, al final el tipo no hacía nada de fuerza sino que el vehículo caminó solo con la fuerza de los demás”

Sabes, mientras no empieces a empujar tu auto nadie te va ayudar; tienes que empezar tu solo para que Dios también actúe y al final solo tienes que poner tus manos sobre tu problema y Dios dará todo el impulso que necesitas, entonces la soledad también es el resultado de esperar que otros hagan lo que tú puedes hacer y no solo esperes de otros, tú también puedes hacer por otros, porque siempre que hagas la voluntad de Dios no va haber soledad en tu vida y tu vida espiritual va ser saludable.

El segundo factor es que sin santidad no podemos sentir su presencia;  usted y yo vivimos en plena libertad para hacer lo que queramos sea bueno o malo, usted decide como quiere vivir, haga lo bueno y se va sentir bien, haga lo malo y se va a sentir fatal si usted teme a Dios.

Nadie puede estar lunes, martes y miércoles en la iglesia rodando lagrimas cuando está alabando a Dios y jueves viendo pornografía, sábado en la iglesia y el domingo en la disco, es allí que muchas veces no le sentimos placer a la vida y terminamos sintiéndonos solos y sabe ¿Por qué? Porque Dios necesita hombros  limpios para que carguen con el Espíritu Santo, si usted no siente su presencia es porque algo está haciendo que a Dios no le agrada, porque Dios no puede ser cargado en hombros que aun no están limpios porque no tienen la fuerza suficiente para cargarlo.

Dios dijo a Moisés que apartara la tribu de Leví para que cargara con el arca y todo lo santo del tabernáculo, entonces los apartó de los demás para que le sirvieran porque si no nos apartamos del mundo nunca vamos a poder servir a Dios.

Entienda esto: cuando nos apartamos del mundo es para heredar el reino de los cielos, Dios hizo sentir en mi corazón que nos sentimos solos porque algo estamos haciendo mal o no nos estamos apartando para Dios o estamos esperando que otros hagan lo que a nosotros nos corresponde hacer.

Cuando se pregunte porque se siente solo ya tiene una respuesta.

Quiero terminar orando para que usted qué lee también se tome un momento para hablar con Dios

Padre Santo  quiero aprovechar esta oportunidad de escribir  lo que usted ah puesto en mi corazón, para que toda persona que lee entienda que sin santidad nadie puede sentir su presencia, ni ver sus maravillas, toca nuestros corazones para entender y comprender que cada vez que nos desviemos de tu voluntad vamos a tener serias consecuencias y ahora que sé que tengo que actuar para que Dios actúe antes de culpar a otros, haré lo que tenga que hacer para que tu poder se manifieste en mi vida y cuando me sienta mal pueda identificar que es lo que estoy haciendo que no te agrada.

Permíteme apartarme del mundo para servirte y heredar el reino de los cielos, así como lo hiciste con la tribu de Leví. Bendice a todo el que está leyendo y  que tus frutos se puedan ver en la vida del que se aparta del mundo y que podamos dejar huellas que otros sigan, amen.

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